Sois muchos los que me habéis
preguntado sobre los principios del entrenamiento deportivo. A continuación
aclararé lo que se entiende por principio del entrenamiento y veremos cada uno
de estos principios.
Los principios del entrenamiento deportivo los
podemos definir como las guías, reglas, pautas o directrices generales basadas
en las ciencias biológicas,
psicológicas y pedagógicas que sirven para optimizar el proceso del
entrenamiento, obteniendo los resultados adecuados. Se refieren a todos los ámbitos
y tareas del entrenamiento; determinan el contenido, los métodos y la
organización de éste.
Todos los principios del
entrenamiento se relacionan entre sí garantizando la aplicación correcta de
todo proceso de entrenamiento. Dependiendo de la bibliografía consultada
existen diferentes tipos de principios del entrenamiento.
A continuación expondré los 15 que estudié en su momento y que he
aplicado en los diferentes procesos de
entrenamiento en mayor o menor medida.
Principio de la Unidad Funcional: El organismo
funciona como un todo indisoluble. Cada uno de los órganos y sistemas están
interrelacionados con el otro, hasta el punto de que el fallo de cualquiera de
ellos hace imposible la continuidad del entrenamiento. Cuando desarrollamos una
capacidad se ven afectadas todas las demás (transferencia positiva o negativa).
Por tanto el desarrollo de las capacidades se debe hacer de forma simultánea y
paralela.
Principio de la Multilateralidad: Según este
principio, con un entrenamiento multilateral, es decir, el entrenamiento
simultáneo de de varios factores o capacidades, se consiguen mejores resultados
que con el entrenamiento unilateral o específico de una sola cualidad. Ya que
con el entrenamiento unilateral, mientras se progresa en un sector se puede
retroceder en los demás.
Principio de progresión o del Incremento paulatino del
esfuerzo: Según este principio, cuando se trabaja durante un determinado
tiempo con una carga determinada el organismo se adapta a ella y se hace
necesario modificar o incrementar las exigencias de la carga para que se
produzca el proceso de adaptación o supercompensación. A medida que el sujeto
se adapta al entrenamiento, su umbral de estimulación aumenta y se debe aplicar
una carga mayor.
Principio de Sobrecarga: Según este principio para que se produzca el proceso de adaptación, la carga de trabajo utilizada (frecuencia y/o volumen de entrenamiento) debe superar el umbral de esfuerzo o estimulación (dentro de los límites de tolerancia) que es diferente y variable para cada sujeto. Si se aplican estímulos de baja intensidad inferiores al umbral de estimulación, no se produce ningún efecto de adaptación, salvo que éste se repita sistemáticamente en muy cortos periodos de tiempo y durante un largo proceso, en cuyo caso se puede producir un efecto acumulativo.
Principio de la Supercompensación: Cuando la carga de
trabajo utilizada en el entrenamiento supera el umbral de estímulo se produce
la supercompensación que es la adaptación biológica crónica (duradera) que se
produce en nuestro organismo como
consecuencia de ese entrenamiento y que conlleva una mejora del rendimiento. A
medida que transcurre el proceso de entrenamiento, los umbrales de estimulación
irán cambiando, por eso si se sigue trabajando con las mismas cargas durante
largo tiempo (días, semanas…) ya no existirá supercompensación y será necesario
incrementar la carga de trabajo. La supercompensación se produce primero a
nivel funcional y luego en el somático. En otras palabras: si hacemos un
trabajo de fuerza, primero se incrementa la fuerza y/o velocidad y luego, la
hipertrofia como valor supercompensatorio.
Principio de Variedad: Va ligado a los principios de
progresión, sobrecarga y supercompensación. Hay que dar variedad a los
entrenamientos porque cuando un sujeto se acostumbra a un determinado tipo de
trabajo, entonces los estímulos ya no provocan en el organismo las respuestas
buscadas.
Principio de Continuidad: Este principio viene ligado
al de periodicidad. Según este principio debe haber continuidad de una carga
con respecto al tiempo, tanto para el acondicionamiento general como
específico,
para que se produzca el proceso de adaptación que conlleva una
mejora funcional. Por tanto, un ejercicio aislado, o un entrenamiento muy
distante de otro, no producirá ningún efecto positivo en el proceso de
adaptación por haberse perdido los efectos del anterior entrenamiento o
ejercicio. Esto no quiere decir que el deportista no debe descansar. Esta fase
del entrenamiento tiene tanta importancia como el trabajo realizado en sí.
Cuando los descansos son los adecuados, el organismo asimila la actividad
realizada, entra en fase de supercompensación y la capacidad funcional del
organismo aumenta. En los deportistas entrenados durante años, la estabilidad
de la capacidad de rendimiento es mayor que en los que llevan menos tiempo
entrenando. Además los muy entrenados tienden a recuperar con relativa rapidez
la pérdida de rendimiento.
Principio de Periodicidad: Basándose en el principio
de continuidad, el entrenamiento debe organizarse en estructuras (periodos) que
cumplan las leyes de intensidad óptima y supercompensación. El entrenamiento
deportivo se debe estructurar en un tiempo determinado (periodos), debido a las limitaciones biológicas del deportista que le impiden mantener la forma durante mucho tiempo y también para procurar el perfeccionamiento deportivo. La planificación y ejecución de determinados ejercicios forma una sesión. La unión de varias sesiones
forma un Microciclo (1 semana).
Varios Microciclos conforman un Mesociclo
(1mes), los cuales se estructuran en Etapas,
éstas en Períodos, los períodos en Macrociclos (1 año), y éstos a su vez
en Megaciclos (+1 año).
Principio de Especificidad: Según este principio, un
entrenamiento específico de una capacidad o habilidad deportiva producirá
adaptaciones biológicas al entrenamiento o mejora del dominio técnico que serán
únicos para la actividad realizada: entrénese para carrera y será bueno para
carrera, entrénese para levantar pesas y será bueno en pesas. Siempre teniendo
en cuenta el Principio de la Multilateralidad, por tanto, debemos desarrollar
un entrenamiento multilateral incidiendo en la capacidad o habilidad que
queremos mejorar.
completamente distintas desde
el punto de vista funcional, motor, psicológico, etc, y es por eso que las
mismas cargas de entrenamiento producen diferentes reacciones en los diferentes
deportistas, e incluso en el mismo deportista en diferentes periodos de tiempo.
Por todo ello los entrenamientos deben ser estrictamente individualizados.
Principio de los Retornos en Disminución: Según este
principio, en cualquier modalidad deportiva el progreso es muy veloz y patente
al comienzo de la vida deportiva de una persona, disminuyendo posteriormente la
velocidad de mejora de rendimiento.
Principio de la Recuperación: Según este principio,
los periodos de recuperación son esenciales tanto en el transcurso de una
sesión de entrenamiento como durante todo el año. Cuando el esfuerzo se repite
sin que el deportista haya descansado y se haya recuperado, el nivel funcional
desciende y se produce el agotamiento. Para que se produzca mejora funcional el
sujeto debe descansar y recuperarse del esfuerzo realizado.
Principio de la
participación activa y consciente en el entrenamiento: Según este principio, el deportista cuando entrena
debe saber por qué realiza una tarea en concreto y no otra, debe saber lo que
está haciendo, cómo lo está haciendo y para qué lo está haciendo, es decir,
debe ser consciente de su entrenamiento. Los aprendizajes motrices se
consolidan más rápidamente cuando el deportista es consciente de su
entrenamiento.
Principio de Transferencia: Según este principio, la realización o aprendizaje
de un ejercicio o el desarrollo de una determinada cualidad puede tener una
transferencia positiva, negativa o neutra, sobre otro ejercicio o cualidad. Por
ejemplo: si el aprendizaje de una tarea es motivo de interferencia sobre el
aprendizaje de una segunda tarea hablamos de transferencia negativa. Si por el
contrario el aprendizaje de una tarea facilita el aprendizaje de una segunda
tarea hablamos de transferencia positiva. En el caso de las capacidades físicas
básicas, si incidimos de forma unilateral sobre una de ellas, por ejemplo,
sobre la fuerza, puede tener una transferencia positiva hacia la velocidad,
pero negativa hacia la flexibilidad.
Principio de la
Accesibilidad: Según este principio, al
deportista se le deben plantear exigencias de carga que pueda encarar
positivamente. Deben evitarse tanto las exigencias bajas como las
sobreexigencias. Este criterio está altamente ligado con lo que se denomina
“sistematización” del entrenamiento, lo cual se sustenta en tres criterios
básicos:
a)
Ir de lo mucho a lo poco.
b)
De lo sencillo a lo
complejo.
c)
Y de lo conocido a lo
desconocido.